Entre los dos se puede lograr más. La importancia del apoyo mutuo.
Según el concepto en Wikipedia, el apoyo mutuo o ayuda mutua es un término que describe la cooperación, la reciprocidad y el trabajo en equipo, y que conlleva o implica un beneficio mutuo para los individuos cooperantes.
Estadísticas recientes han mostrado que el concepto de apoyo se aprende, se recibe y se ofrece, principalmente, en el hogar o familia en que nos hemos criado y no, necesariamente, en nuestra participación como ciudadanos en el área de política o económica de nuestro país.
¿Cuáles son los factores que evidencian este apoyo dentro del seno familiar? El amor, afecto, disponibilidad, comprensión, cuidado, seguridad son; entre otros, los signos evidentes del apoyo mutuo que son ejercidos en cada etapa que como familia se viven en cada uno de los ciclos vitales.
Se define como “ciclo vital” al conjunto de los “momentos” por los cuales atraviesa cada familia y los miembros correspondientes. Estos “momentos” incluyen: vida matrimonial, nacimiento de los hijos, infancia, adolescencia y juventud de los hijos; amor, noviazgo y matrimonio de hijos; Síndrome del nido vacío, transición de roles de padres a abuelos, familias con los abuelos en casa, etc.
Si es en la familia donde se aprende el concepto de apoyo mutuo, afirmaremos entonces que los padres juegan un rol protagónico como modelos de apoyo mutuo y, por consiguiente, traer así bienestar y seguridad a cada miembro de la familia. Los padres se convierten en los verdaderos actores que más tarde serán imitados por sus hijos.
De manera concreta, ¿cómo se da ese apoyo mutuo en el seno familiar?
¿Cómo demostrar elementos de cooperación, reciprocidad y trabajo en equipo como características vitales en el apoyo mutuo? Tomemos como ejemplo un par de etapas de los ciclos vitales para demostrarlo.
Vida Matrimonial: Hoy en día en la mayoría de los hogares ambos cónyuges trabajan fuera de casa, ambos llegan cansados y hay que poner la cena sobre la mesa; por consiguiente, el apoyo mutuo significaría que ambos trabajen para preparar la cena o que ambos tomen turnos durante la semana para prepararla. En algunos casos, uno de ellos diría que no tiene habilidades culinarias y para resolver esta situación entonces la pareja a través del dialogo evaluaría sus habilidades para repartirse ciertas tareas caseras y evitar así que solamente uno de ellos haga la totalidad de las tareas de la casa y, por consiguiente, termina trabajando dentro y fuera de la casa. En caso de que uno de ellos sale a trabajar y el otro queda en casa trabajando, la cooperación también sería necesaria reconociendo que ambos han estado invirtiendo su tiempo para el bienestar de la familia. La diferencia es que uno trabaja desde afuera y el otro desde adentro de la casa. La cooperación no solo se debe ver desde el punto de vista de ayuda concreta con los quehaceres, sino también con palabras de gratitud, comprensión, afecto, reconocimiento hacia la labor que cada uno de los cónyuges realiza por el bienestar familiar. ¡Pronto descubrirán que entre los dos se puede lograr más!
Otro de los ciclos vitales es la vida matrimonial con hijos pequeños: Si la pareja aprendió a apoyarse mutuamente desde el inicio de su vida conyugal, la venida de los hijos no los tomará de sorpresa. El criar hijos es una ardua tarea que no debiera ser destinada solo a las madres. Sea que la madre trabaje fuera o dentro de la casa, es necesario que la pareja comprenda que la tarea de criar hijos es un trabajo en equipo. He visto muchas veces al padre con su hijo en brazos entregarlo a la madre cuando el pequeño llora. Es allí donde el apoyo mutuo se debe practicar aprendiendo maneras de calmar a su hijo para darle, no solamente un “descanso a la madre”, sino también mostrar al hijo que ambos padres están “a cargo” y ambos son figuras importantes para él. Con el tiempo, este niño en su etapa adulta, entenderá que el haber sido estimado y apoyado por ambos padres en sus distintas etapas de crecimiento, ha contribuido a su salud integral y mental del adulto en el que se ha convertido.
Recordemos que es en el contexto familiar donde recibimos y aprendemos el verdadero concepto de apoyo mutuo y que éste no solo contribuye al éxito de cada uno de los miembros de la familia en sus diferentes ambientes donde se desenvuelven, sino también al bienestar social, emocional y psicológico de cada uno de ellos.
Colosenses 3:12-14 Vestíos pues, como elegidos de Dios, santos y amados, de corazones compasivos, de benignidad, de humildad, de mansedumbre y paciencia, soportándoos unos a otros y, si alguno tiene queja contra otro, perdonándose unos a otros, como el Señor os perdonó, así también debe perdonar. Y sobre todo esto, revestíos del amor, que es el vínculo de la perfección.