Una Cita Romántica con su Cónyuge
por
Elizabeth Woehr
¿Recuerda cómo todo el cuento de hadas en su relación con su cónyuge comenzó con una inocente, curiosa, o quizás pre-programada salida con su entonces “amigo especial o pretendiente”? ¿Recuerda cuánto disfrutaron conociéndose el uno al otro? ¿Y cuánto se reían? ¿Y que los temas de conversación parecían no terminarse, y que hasta les faltaba tiempo para conversar—al punto que cuando llegaban a sus respectivas casas se llamaban por teléfono o se enviaban textos para seguir conversando? Sí, de seguro lo recuerda, a pesar de que eso quizás pasó hace mucho tiempo atrás. Quizás también recuerda que luego, al casarse, hicieron muchas promesas y compartieron ideas muy creativas de cómo mantener esas salidas románticas “pase lo que pase”. Lamentablemente, con el pasar del tiempo éstas salidas fueron escaseando o extinguiéndose. Al meditar en esto, resulta muy fácil encontrar los culpables que fueron anulando esas salidas—los niños, el trabajo, los compromisos de amistades y familia extendida, los compromisos en la iglesia, etcétera.
Pero le tengo una noticia: nunca es tarde para recuperar esas salidas que definitivamente no solo encenderán nuevamente la chispa del amor, sino que les brindará un momento especial de diálogo, carcajadas, acercamiento, aún más, volverse a enamorar al descubrir que los años han pasado y que aún se aman, y que desean pasar más tiempo juntos divirtiéndose.
Mi consejo es que, si ha pasado mucho tiempo sin tener estas citas románticas, evite plantearse metas muy altas como: salir semana a semana, ir al restaurante más caro de la ciudad, o salir todo un fin de semana fuera de la ciudad. Inclusive debe evitar llegar a pensar que necesitan un presupuesto extra para las salidas románticas. Lo más importante es que puedan dialogar sin echarse la culpa mutuamente, del por qué han dejado de salir.
El hecho de que están conscientes que necesitan salir juntos ya es un excelente comienzo, y felicitaciones por ello. He aquí unas simples, pero efectivas ideas de cómo recuperar esos tiempos juntos.
-Si tienen niños chicos, obviamente necesitarán de alguien que los cuide.
-Si ambos salen tarde del trabajo, y regresar a la casa consumiría más tiempo para salir en una cita, entonces vayan cada uno por su lado al lugar en que han convenido encontrarse. Si van por separado, eso les ahorrará tiempo y creará un sentido de expectativa de cómo encontrarse, de mirar cómo están vestidos (pues salieron de la casa a diferentes horas y no se dieron cuenta de su vestimenta). Sentirán esa misma sensación de expectativa y emoción que sintieron cuando eran novios, y probablemente seguirán con ganas de completar la conversación en casa, y no tendrán que llamarse por teléfono para hacerlo como cuando eran novios. Por experiencia propia le digo que esto funciona!
- Dependiendo del clima, salir a caminar a un lugar abierto cerca de un lago. Como regla general mi esposo y yo cargamos en el carro nuestras sillas plegables de verano, así podemos encontrar un lugar apropiado y sentarnos a conversar; disfrutamos mirando un lago o asistiendo a un concierto al aire libre.
- Durante el invierno preferir actividades en el interior: restaurantes, juegos de mesa en casa, y para añadir algo de ejercicio, caminar en un mall o mega tienda mostrando en esta última autodominio para no detenerse a comprar.
A la falta de una buena “babysitter” no podrán salir, pero podrán crear un ambiente romántico en casa. Si solo tienen un pequeño balcón, una mesita y un par de sillas es suficiente para una velada romántica al aire fresco. Nos ha dado buen resultado el colocar un bonito mantel, encender una vela o colocar una linda planta para disfrutar de una cena al aire libre. Eso ya convierte el ambiente en algo especial para disfrutar juntos. Si tienen un jardín o patio grande, saquen un par de frazadas, coloque una sobre el césped y cúbranse con la otra, y dialoguen mientras observan las estrellas.
- En algunas actividades disfrutará más el ejercicio, en otras una buena conversación mirándose cara a cara, pero cualquier momento juntos definitivamente los hará sentir más cerca y más conectados y, porque no decirlo, más enamorados. Sentirán así que su relación es una prioridad.
En una investigación hecha por IFS (Institute For Family Studies) se descubrió que las parejas que salían en citas románticas tenían aún más probabilidades de permanecer juntas que aquellas que casi nunca salían. Encontraron que este efecto solo se aplica a las parejas casadas y no a las parejas que cohabitaban.
¿Por qué las parejas casadas parecen beneficiarse de la salida romántica ocasional, mientras que las parejas que cohabitan no lo hacen? Tal vez se reduce a la suposición original detrás de las noches de cita. Al salir cada cierto tiempo, las parejas casadas refuerzan la importancia de su relación. Debido a que su relación se basa en un acto claro y público de compromiso, una noche juntos hace una declaración sobre la naturaleza de la relación. En otras palabras, la salida romántica tiene un significado y un propósito.
Para las parejas que no están casadas, sin embargo, es mucho más probable que haya algún elemento tácito de ambigüedad sobre su futuro juntos. Muchas o la mayoría de las parejas que no están casadas difícilmente tendrán ese momento en el que ambas partes hayan dejado en claro que el plan es permanecer unidos de por vida. En ese caso, una salida nocturna sería simplemente una salida nocturna. ¡Hum! Es algo para considerar.
Entonces, con toda esta información a la mano, no espere más para afirmar su relación: salga en citas románticas con su cónyuge. ¡Ahora!
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